lunes, 27 de septiembre de 2010

Diario de a bordo: Ruta Gastro-Enológica. Día 9 de Agosto. Nîmes.

Pues amaneció el día 9 en el camping y después de desayunar tranquilamente desmontamos la tienda y nos pusimos en marcha, que la cosa no era fácil.

Y es que al ser un viaje abierto, no salimos con etapas ni paradas cerradas y fuimos reservando sobre la marcha, corriamos el peligro de que pasara lo que pasó. ¿Y que pasó?. Pues que el destino que pensamos el día anterior era Montpellier para pasar los dos días siguientes, después Narbonne y después Perpignan de vuelta a casa pero el día 9 no había ni un sólo hotel asequible a nuestras posibilidades en Montpellier....ni camping tampoco, asi que tuvimos que variar el recorrido.

Tras un estudio de las posibilidades en un café de Narbonne con WIFI gratis, el destino de ese día fué Nîmes, ciudad de la que ya teníamos referencias por la familia, los dos días siguientes "ocupariamos" Montpellier y de bajada para España pararíamos en Narbonne a comer y dar una vuelta.

Reservamos hotel y partimos, por carreteras nacionales como todo el trayecto de la ruta. Una de las cosas que más me impactaron durante éste viaje, y ya lo he reflejado en algun post anterior, fueron los paisajes de viñedos por todas partes a través de la carretera. Mires donde mires, durante kilómetros y kilómetros no se ve otra cosa que viñedos. Y eso es un trayecto de miles de kilómetros es increible.

Llegamos al hotel a medio día, compramos algo para comer y comimos en el hotel temprano para ducharnos y aprobechar la tarde haciendo turismo por el centro. Y como no podía ser de otro modo, después de la ducha el primer destino fué acercarnos a la oficina de turismo del centro. Tras coger unos mapas y recibir información sobre algunas rutas del centro histórico comenzamos por la Maison Carré, antiguo templo romano del siglo I donde ahora hay un espectaculo 3D sobre personajes famosos de Nîmes. Está situada en una plaza enorme con multitud de cafés rodeándola.

Después seguimos las rutas que nos indicaron en turismo, pasando por la Plaçe d´Horloge (Plaza del reloj), la Cathedrale de Saint Castor y recorriendo todo su centro peatonal. Paramos en una de las múltiples tiendas de vino que pueblan el centro, donde la estrella son los vinos locales y compramos una botella de blanco con uva viognier y un tinto local (en el ultimo post haré un listado de los vinos comprados).





El recorrido nos llevó hasta la parte más histórica e interesante de la ciudad, el Coliseo de Les Arenes, un Anfiteatro Romano también del siglo I d.c. donde las luchas de gladiadores han dado paso a las fiestas taurinas, pero ántes fué fortaleza, capilla e incluso castillo de los condes de Orange para reconstruirse después con su aspecto original para albergar corridas de toros. Muy bien conservado, impresiona al verlo.





Se iba echando la noche encima y había que buscar algún sitio para cenar, ya os he contado que allí se cena temprano, muy temprano. Asi que nos adentramos de nuevo en las calles peatonales que rodean el Coliseo y llegamos a la Plaçe du Marché para sentarnos en un local que tenía buena pinta y que tenía un nombre que aunque fuera fonéticamente nos sonaba familiar, "Le Paseo".

Dentro de su amplia carta y fórmulas escogimos un menu más una fórmula de Entrecotte de novillo que consistían en:

* Menú: Ensalada de Gessiers y lardons con cruttons de pan, brocheta de buey con patatas, flan y café solo.

* Fórmula novillo: Entrecotte de novillo con patatas,ensalada y mostaza, mousse de 3 chocolates y café solo.

*Para acompañar el vino elegido fué un Costiers de Nîmes (que busqué al día siguiente) en pichet de medio litro.

El precio total del menú y la fómula que incluía postres y cafés más el vino fué de 31 euros.








Después de la cena, un paseo para bajar la comida y vuelta al hotel, que ya pasaban de las 23 y al día siguiente había que ver ántes de irse Les Jardins de la Fontaine, del siglo XVII aunque dentro se encuentran vestigios romanos. Allí se encuentran también La Torre Magna, el Templo de Diana y la Muralla Romana.

Y ya con la reserva hecha partimos a Montpellier, una de las ciudades que más me entusiasmaba ver del sur-este de Francia, entre otras cosas por sus vinos, que es a lo que fuimos.....os dejo una última foto de nuestra visita del 10 por la mañana y en breve continuamos con Montpellier.




jueves, 23 de septiembre de 2010

Previo XIII Encuentro, Baltos 2007, D.O. Bierzo

Ya estamos preparando nuestro próximo Encuentro, sera el nº 13, un número perfecto para adentrarnos en el otoño con fuerza y con muchas ganas de seguir descubriendo el mundo del vino.


El elegido en esta ocasión es BALTOS 2007, D.O. Bierzo, de la bodega Domino de Tares, situada en la provincia de León. Monovarietal de uva mencia, muy arraigada en la zona, este tinto viene a romper con nuestra línea estival, que como sabeis ha sido más refrescante y afrutada, a base de rosado, cava y vino dulce.




El Encuentro tendrá lugar el viernes 1 de octubre en La Metáfora, a las 21h; se ruega puntualidad a los asistentes, puesto que la cata y la posterior degustación pueden demorarse en exceso si nos retrasamos.

Como viene siendo habitual el precio es de 18 euros por persona y los cinco platos a degustar un enigma que descubriremos juntos a lo largo de la velada. Podeis confirmar vuestra asistencia a través del blog, facebook o correo electrónico.



Nos vemos en La Metáfora!

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Ficha técnica XII Encuentro - Liberalia Uno D.O. Castilla y León


Ficha Técnica

Marca:
Liberalia Uno
Añada: 2007
Tipo de Vino: Blanco dulce
Tipo de Uva: 90% Moscatel de Grano Menudo y 10% Albillo
Bodega: Liberalia
Región: Zamora
Denominación de Origen: Castilla y León

Comentario de Cata

Cosecha: 2007
Fecha de Cata: 03 de septiembre de 2010

Cata

FASE VISUAL: Superficie de liquido brillante, con un color amarillo pálido tirando a dorado con trazas aceitosas. De aspecto cristalino.

FASE OLFATIVA: Muy agradable en nariz y una intensidad notable, aunque con una duración media tirando a corta. Los aromas percibidos fueron frutas tropicales (pomelo), toques de naranja y cítricos, manzana, pera y uva muy madura.

Ya en mi apreciación particular, pasados 30 minutos se avistaban toques herbáceos. Y pasada una hora un olor notable a flores.

FASE GUSTATIVA: Muy agradable en boca, con un equilibrio muy correcto (medio-alto) y una intensidad en boca media. Entre los sabores percibidos encontramos las frutas tropicales nada ácidas, manzana, miel y uva muy madura, casi pasa. Tremendamente afrutado.

Vino que sorprendió totalmente por su adaptación a gran cantidad de sabores y platos, ya que no hubo casi ninguno de los 5 que no pegara (en mi caso y el de alguno más el queso era demasiado agresivo, demasiado contraste), pero en general la sensación fue inmejorable con los platos.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Diario de a bordo: Ruta Gastro - Enologica. Día 8 de Agosto. Carcassonne

Partimos de Toulosse, al lado de la fábrica del Airbus por cierto, bastante temprano después de desayunar algo con destino a Carcassonne para ver la Ciudadela Medieval.

Antes, por la mañana, llegamos el camping donde ibamos a alojarnos, a escasos 5 km de Carcassonne pueblo para instalar la tienda y descansar un rato en la piscina. Después comeríamos y a primera hora de la tarde iriamos de nuevo a Carcassonne a ver la Ciudadela para cenar allí por la noche.

La comida como dije fue en el camping y consistió en una porción de queso comprado esa mañana, una ensalada de pollo y crudités, atún, paté de canard y taboulé de verdura y pollo. Las ensaladas que venden allí en los supermercados estan realmente genial, el queso era extraordinario (también lo compramos después para traernoslo a Granada) y el taboulé para ser preparado no estaba nada mal. Lo acompañamos con un St Emilión (Artur des Moines) también comprado esa mañana. Botella de 37,5 cl, un tamaño totalmente instalado en el consumo francés.




Llegamos a la Ciudadela sobre las 15:20 y aparcamos en uno de los múltiples parking que hay en la zona, con un sistema curioso: la primera hora es gratis, las 5 horas restantes son 6 euros (si te vas antes de esas 5 horas siguen siendo 6 euros) y pasadas esa 5 horas te cobran a euro cada hora....lo curioso, una vez visto la Ciudadela es lo bien currado que se lo tienen porque en una hora no te da tiempo verla, con lo que ya que te cobran las 5 siguientes te quedas a comer y haces gasto dentro....unos vivos, ya os digo.....

Al llegar a la explanada de acceso resulta increible lo que ves....una pena la aglomeración a centenares de personas que se agolpan porque si no sería un lugar realmente estremecedor en su primera visión. Las manadas de gente lo hacen menos romántico sin duda.

Nuestro primer destino una vez dentro (el acceso es gratuito) fué el Castillo que cerraba primero y que se cobra aparte. No he investigado cuantas restauraciones han hecho allí pero os aseguro que parecía que se habían ido hacía 15 minutos. Realmente impresionante. Os dejo una foto para ilustrar.







Lo siguiente en cerrar era la Basílica de Saint Nazaire, de entrada gratuita. Y para allá nos fuimos. Un interior precioso con unas vidrieras espectaculares pero que la gran cantidad de gente ensombrecía el momento. Las gárgolas del exterior impresionantes, perfectamente conservadas. Muy muy recomendable.

El resto de la tarde la pasamos recorriendo las murallas, paseando tranquilamente por sus calles empinadas. Recorrimos todos los itinerarios que nos recomendaron en turismo por su centro historico, donde a día de hoy todavía viven cerca de 120 habitantes y existen inumerables cantidades de tiendas de artesanos, recuerdos y productos locales varios (vinos, cassoulette, etc...).



Tras probar uno de sus múltiples bar a vins y comprar una botella de AOC Córbiéres, comenzamos a centrar nuestros esfuerzos en conseguir un sitio donde cenar bien y seguimos paseando hacía la zona de la basílica de nuevo, viendo los locales que ibamos pasando a nuestro paso.

El elegido fue "Les jardins des Templieres", al lado de la basílica y con un pátio interior muy acojedor. La atención es bastante correcta y como prueba deciros que aguantaron e hicieron lo posible de entender mi francés intentándoles explicar el funcionamiento del foro. El precio por los dos no llegó a los 32 euros y los platos fueron:


  • Ensalada Jardins des Templeires: lechuga, tomate, aceitunas, mollejas de pato confitadas, magret fumé de pato y 2 rebanadas de pan dulce con foie y almendras tostadas.


  • Ensalada de salchicha de cordero con lechuga, tomate, aceitunas, almendras tostadas.


  • Manchons de canard a las hierbas con tagliatele.


  • Y de postre del menú escogí uno llamado Ile flotant (crema inglesa y un souflé con base de bizcocho flotante encima).


  • 2 cafés realmente buenos, cosa rara por allí.


  • Todo bañado con un vino de la tierra, de Limoux.





Otro paseo nocturno a la Ciudadela, que estaba realmente bonita iluminada, y una última prueba a uno de los prodcutos típicos locales. No recuerdo el nombre pero era igual que una almohadilla pero con forma de rosa y azucar encima. Otra de sus especialidades gastronómicas, presente en toda la ciudad es el Cassoulette, un guiso de alubias, pellejo y carne de cerdo, salchichas y confits de oca o de pato.

Después, vuelta al camping que al día siguiente había que recoger pronto la tienda para llegar a Nimes a buena hora.
Os aconsejo a todos el lugar sin duda, yo por mi parte si algún día paso por allí haré lo que pueda por volver a pasear sus empinadas calles adoquinadas aprobechando para adentrarme más en sus vinos, como por ejemplo los de Fitou y Limoux que no tuve ocasión por falta de tiempo de conocer más profundamente.



Crónica del XII Encuentro: Liberalia Uno

Tras nuestro descanso veraniego, iniciamos la actividad del foro el pasado 3 de septiembre con el XII Encuentro en el que degustamos un vino dulce, Liberalia Uno, acompañado de las delicias que a continuación os describimos y que, como siempre, creó para nosotros La Metáfora.

Os lo contamos todo a través de nuestra FICHA GASTRONÓMICA:


PRIMER PLATO: cabrales, sidra, manzana ácida.

El contraste protagonizó el primero de la noche, a base de cabrales a la reducción de sidra y compota de manzana, con textura cremosa y emplatado equilibrado y elegante.

Su combinación con el vino no dejó indiferente a ninguno de nuestros comensales, levantado pasiones y recelos por igual: para algunos mataba por completo el sabor del vino, para otros -entre los que se incluye esta humilde redactora- fue una mezcla simplemente perfecta.

Como nombres elegidos os mostramos: "Tostas cremosas de gorgonzola y dulce de manzana"; "Aperitivo de queso y frutas en crema"; "Crema suave de queso azul con compota de manzana".








SEGUNDO PLATO: foie, zanahoria, melón.

Muy celebrado fue el segundo plato, protagonizado por un exquisito medallón de foie fresco a la plancha, acompañado por láminas de melón y puré de zanahorias con clavo, que daba color a un vistoso montaje. Práctica unanimidad de los presentes en cuanto a su buen emplaste con el vino.


Sus nombres: "Foie fresco con esencia de melón y pure de zanahorias"; "Delicia de foie y zanahoria"; "Medallón de foie con crema de zanahoria y transparencias de melón".











TERCER PLATO: rape, jengibre,trufa.

El pescado hizo su aparición en tercer lugar, en un plato que acabó protagonizado por lo exquisito y original de la salsa que lo bañaba, a base de crema de patata y trufa, reducción de cítricos y jengibre, con polvo de cobre (sí, habéis leido bien, polvo de cobre).

A destacar que esta misma salsa restaba sabor al vino, que sin embargo hizo buenas migas con el pescado, como era de esperar.

Algunos de los nombres propuestos: "Rape sobre isla de patata en mar de sirope"; "Rape sobre cama de trufa y jengibre"; "Rape bañado en trufa cremosa y esencia de jengibre".









CUARTO PLATO: secreto ibérico, castañas, lombarda.

El cuarto lugar fue para el secreto ibérico, una carne exquisita muy bien acompañada de puré de castañas y guarnición de col lombarda e higo asado, muy celebrado como plato pero en claro contraste con el vino.

Muy celebradas las castañas en puré, por su fantástico sabor y su buena relación con el vino.

Como denominaciones elegidas: "Secreto ibérico sobre crema de castañas y caramelo de higo"; "Ibérico con puré de castaña"; "Secreto otoñal".








QUINTO PLATO: helado, guirlache, agua de azahar.

Farolillo rojo en forma de helado con sabor a guirlache de almendras y acompañado de un original sorbete de agua de azahar, que sin embargo no agradó como acompañante del vino al ser demasiado dulce, aunque fue muy celebrado por su sabor.


Los nombre elegidos son: "Helado garrapiñado con agua de azahar"; "Helado al caramelo con sorbete de azahar"; "Helado caramelizado con toques de azahar".






Nuestro menú estuvo además encabezado por un aperitivo en forma de bombón relleno de crujiente de bacon y coronado por sal maldon, en un fantástico contraste agridulce que maridaba a la perfección con el vino, y culminó, tras el helado, con pequeños bombones de galleta Oreo bañados en chocolate blanco (deliciosos).



Las CONCLUSIONES del ranking de la noche:

  • El plato más aplaudido por los comensales fue el foie, seguido de cerca por el secreto ibérico.
  • En cuanto al maridaje, repite el foie por su buen hacer con el vino, junto a la crema de cabrales y el rape.



La experiencia en la cata de un vino dulce ha sido divertida y muy satisfactoria; hemos podido comprobar que su registro va mucho más allá de los postres, experimientando sensaciones fabulosas al maridarlo con otro tipo de platos. Tomad nota y no dejeis de probarlo.

¡Nos vemos en la próxima!

viernes, 17 de septiembre de 2010

Rutas por Granada, ¿te vienes de vinos?

Después del verano recuperamos una de nuestras actividades más populares: la ruta de vinos por Granada, para descubrir todos los lugares que alberga nuestra ciudad, en los que disfrutar de un buen vino.

En esta ocasión nos reuniremos en LA FONDA, vinoteca situada en la calle Alhamar, nº 24, en la que degustaremos distintas denominaciones para tratar de identificar y disfrutar cada una de sus peculiaridades, a saber: Granada, Ribera y Rioja, en un ejercicio que promete ser interesante y divertido.








Los vinos escogidos para la ocasión, salvo cambio de última hora, serán Mendez Moya crianza de Granada, Condado de Haza crianza de Ribera del Duero y Bai Gorri Crianza de Rioja.....esperamos que os guste la elección.

Nos vemos el próximo JUEVES 23 de septiembre a las 21.30h en la LA FONDA; para facilitar la organización del evento, os rogamos que confirmeis vuestra asistencia a través del blog, correo electrónico o facebook. Gracias a todos.


Os esperamos!

lunes, 13 de septiembre de 2010

Crónica Apócrifa del XII Encuentro-Liberalia Uno

Prefacio

La química nunca falla. Y a veces, la alquimia consigue convertir el oro (Charlize Theron incluida) en un enjambre de serpientes de cascabel albinas, que conservan la sinuosidad y sensualidad original. Es un mundo de precisos engranajes de madera; no hay barniz, todo está limpio. A través de ese espacio-autómata orgánico llegamos a una plataforma circular, en cuyo centro un rechoncho cohete dorado despega con su propulsor de algodón. Sin embargo, hay una parte oculta en ese mundo. Lóbregos pasillos de hormigón, con una irregular y casi siempre escasa iluminación cenital, por cuyas sombras se deslizan claqueteantes los cangrejos verdes.





Cuentos

Finales de verano. El caballero azul busca a su amada. Recorre un laberinto blanco bajo un cielo blanco; sin embargo, en la irregularidad azul delos brillos y reflejos de su armadura, la cosa se complica... Aleteo de pegasos en lontananza, y una leve brisa que arrastra al caballero, en apariencia pesado y metálico, como a un ralentizado copo de nieve. Fuera del laberinto, un tren Art-Deco atraviesa la blanca llanura. Un poco más lejos, la sombra del humo nos devuelve a la nostalgia del otoño.





Espacio exterior (exterior, “día”). El asteroide Carrot-157B ha entrado en órbita de colisión; se trata de un alargado cuerpo celeste que en realidad es naranja por el óxido de hierro. Tras una fugaz trayectoria por la atmósfera, el meteorito hace impacto en el lago de los cisnes, produciendo una onda expansiva de esencia de pato. Tras ésta, la calma nos permite ver un perfecto cuerpo ovalado, entre metálico y cristalino, cuyos reflejos y transparencias fluctúan como si un líquido áureo se moviera en su interior. El choque ha alterado la rotación de la Tierra: ahora podemos descansar junto a una discreta tumba del Valle de los Reyes a la luz de un sol de otoño en Dinamarca. Sobre el parqué bañado por la difusa y lateral luz de las ventanas, las bailarinas se desnudan de sus vaporosos y blancos ropajes, y se acurrucan juntas, entre el sopor y una tierna concupiscencia.


Pradera, exterior, ocaso. En el primer instante tras la puesta de sol, todo cuanto hay en la tierra lo percibimos como negras siluetas: la montaña lejana, la hierba, la casa... Una estrella fugaz, nuestras pupilas se van dilatando y empezamos a sentir el murmullo de animales entre la hierba (bisontes, jabalíes, hienas); no sabemos si están realmente ahí o solo es el eco de lo salvaje. La luz sigue disminuyendo, pero aún podemos ver una sombra antropomorfa realizando danzas rituales con una música casi inexistente, y distinguir los signos grabados en las rocas.





Serpientes enamoradas huyen ante el implacable avance de los robots. Por una secreta cañada, lejos del torbellino de la guerra, llegan a un pequeño templo de fresca piedra, blanca y gastada. Allí, entre los olvidados escudos de bronce de los héroes, encuentran refugio; pero la incertidumbre sobre el futuro las acecha. Han hallado la paz, pero ¿por cuanto tiempo?




Texto: Bertoldo Peñavieja

domingo, 12 de septiembre de 2010

Diario de a bordo: Ruta Gastro-Enológica. Días 6 y 7 de Agosto. Agen y Toulousse.

Alucinados todavía de nuestra visita a St Emilión, el día 6 madrugamos para partir pronto hacía Toulousse ya que ántes queriamos parar en Agen a la hora de la comida.

Hicimos el trayecto a Agen por carreteras nacionales, como casi durante todo el viaje, aprobechando para ver los distintos pueblos y sobre todo los viñedos que enlazan uno con otro a través de todo el camino. Es realmente increible como puedes estar kilómetros y kilómetros sin avistar otra cosa que no sea viñedos.

Sobre las 12 llegamos a Agen, donde lo primero que hicimos una vez aparcado el coche es acercarnos a Turismo y hacernos un itinerario para aprobechar las horas de las que disponíamos.
cómo había poco tiempo, comimos dos platos del día en un establecimiento de comida rápida por lo que tampoco daremos más detalles.
Empezamos por un paseo por el casco, pasando primeramente por la Catedral de Saint-Caprais del Siglo XII que si bien exteriormente no aportaba nada nuevo a lo visto ya en lugares anteriores el interior resultó ser de los más bonitos e impactantes que vimos en todo nuestro recorrido, si no el que más.




Después pasamos por Notre Dame de Bourg, del S XIII y una de las iglesias más antiguas de la ciudad. Seguimos hacía el Museo de Bellas Artes y al salir por un paseo por el Boulevard de la Republique llegamos hasta el río, donde pudimos ver su Puente de Piedra y sus canales que pueblan y recorren la ciudad, como por supuesto el Canal de Garona, que se extiende entre Toulousse y Castelnaudary y que es usado por barcos de pasajeros.

Después de acabar de recorrer el resto de su centro histórico nos dispusimos a adentrarnos en el apartado del Foro Granatensis, pues Agen es famosa entre otras cosas, por el cultivo de la ciruela, gran punto económico de la ciudad.

En una tienda local pudimos asistir a la proyección de un documental sobre el inicio de ésta actividad agraria y la evolución en el tiempo, así como las distintas formas de comercialización de la ciruela de Agen.....no hay nada que podais imaginar que no lo hagan con ciruela: desde perfumes, pasas, rellenas de crema, chocolate, jabones, en pasta.....en fin, absolutamente todo.
Después del documental nos dieron una pequeña degustación con los productos más famosos realizados con ciruelas y después de un café partimos hacía Toulousse, ésta vez por autopista para no llegar demasiado tarde a nuestro hotel.

Llegamos al hotel con el tiempo suficiente para soltar las maletas y darnos una ducha antes de salir a tomar contacto con la ciudad. Al estar Turismo cerrado, tuvimos que echar mano de las guias y sus planos a mini escala, pero aún así nos apañamos bien.
Como no era muy tarde aprobechamos para dar una "vuelta de reconocimiento" por la también conocida como Ciudad Rosa, por el color dominante en la ciudad en su zona antigua debido a la construcción en ladrillo visto de ese color.

Lo primero que resalta es su mezcla de culturas, pues su población está compuesta en gran parte por magrebies, cumunidades negras de las antiguas colonias francesas, indios, asiaticos.....en definitiva una gran mezcla cultural y por ende social realmente interesante.
Esa mezcla hace que el aspecto de las calles sea muy llamativo pues hay negocios de todas clases y de todas las culturas ántes mencionadas.

Como se iba haciendo tarde empezamos a ver sitios para cenar, decantándonos por nuestra segunda Creperie del viaje....en éste caso Creperie du Taur, situada en el 75 de la Rue du Taur, muy cerca de la basílica de Saint Sernin donde nos sentamos en una mesa en la terraza,a pie de la calle que es peatonal.
Había múltiples fórmulas de precios pero nos decantamos por mirar la carta y compartir dos salados, uno de 3 quesos y otro de cordero con carbonara y tomates frescos.
De postre un crepe dulce de chocolate blanco y nueces. Como siempre pedimos un pichet de medio litro de vino del pais, en éste casi de la zona de Cahors, también como en la creperie de Burdeos con cuencos de loza para servirlo.

Después de la cena, un paseo nocturno hasta la Plaza del Capitolio donde grupos ambulantes estaban actuando para los que quisieron pararse....nosotros lo hicimos delante de 3 chicas y un chico que estaban haciendo malabares con fuego mezclado con algo de teatro.
Tras un breve paseo recogimos el coche y nos retiramos hasta el día siguiente que prometía ser intenso.




Al día siguiente decidimos primero rastrear el centro historico ántes de comer por lo que después de conseguir un poco de información extra en Turismo, dónde nos explicaron entre otras cosas que Toulousse fué una de las ciudades donde los republicanos españoles emigraron durante la guerra, teniendo hasta un itinerario recordatorio sobre el exilio español en Toulousse. Otra anecdota curiosa es que al igual que en Agen la ciruela es la estrella y hacen de todo con ella, en Toulousse es la violeta. Hay multitud de tiendas donde puedes encontrar infinidad de cosas realizadas con este flor, comidas, jabones, postres, colonias.....aparte de darte un gustazo al olfato, claro está.

Nos acercamos a Saint Sernin que es de las más importantes del románico Francés y centro principal de peregrinación del Camino de Santiago, dónde después de ver la basílica, con una cripta realmente fantástica, nos dimos una vuelta por uno de los múltiples mercadillos de segunda mano que se dan todos los fines de semana por todo el sur de Francia. allí se npuede encontrar de todo: ropa, artesania, antiguedades, aparatos de gimnasia....en fin, lo que querais.....

Seguimos por la capilla de los Carmelitas, el Convento de los Jacobinos, la iglesia de Nuestra Señora du Taur y el Capitolio para después buscar un sitio para comer pues allí se come mucho antes que aquí y a las 14:30 no es facil en contrar sitio....
Elegimos un sitio llamado Le Parisien, en el 29B del Boulevard de Strasbourg, donde pedimos un menu express del medio día consistente en una ensalada de rofbeff frio con fruta y un crepe dulce de postre de azucar y mantequilla. Olivia pidió una ensalada Gersoise, consistente en lechuga, huevo duro, lardons de bacon y gesiers (mollejas confitadas) de pato a la plancha que he de decir que estaban realmente deliciosas.
Todo ello mojado con un vino de la tierra, pichet de medio litro de la AOC Gaillac. Bueno, muy frutal y algo corto en boca pero gustoso.....
Dos cafes solos pusieron fin a la comida y dieron comienzo a la segunda parte del día ya que aún quedaba mucho por ver.



Hicismos ruta de plazas, ya que como todas las ciudades que vimos estan repletas de ellas y tienen una aire totalmente distintas a las plazas de aquí.....parecidas a Bib Rambla para los granadinos, pero toda la ciudad plagada de ellas. En cada plaza hay multitud de cafeterias, bares y bar a vins, un concepto que me alegraría que funcionara aquí....locales pequeños con terraza solo destinados a vinos y platos para maridar. Entre algunas de las plazas a reseñar, por si alguno tiene intención de ir fueron: Victor Hugo, Wilson, St Escarbes, Rouaix y no perderse por nada del mundo St Georges.

Esa ruta de plazas nos llevó a la Catedral de St Étienne, con una mezcla de estilos y materiales realmente curiosa. Junto con la de Agen y Saint Sernin las mejores del viaje sin duda.
Seguimos con nuestra ruta de plazas por la zona derecha al Capitolio haciendo parada para un café.




El camino nos llevó hasta el Pont Neuf, pasando por el Museo de los Agustinos y Nuestra Señora de la Dalbade. El Pont Neuf une la parte antigua con la zona moderna, entre ellas la que sirvió de alojamiento y hogar para los exiliados Españoles.

Después del turismo, llegó la hora del descanso y optamos por acercarnos a la orilla del Garona, donde tienen una playa fluvial con paseos en barco, cafés y tumbonas.....y allí acabamos el día, tomando el sol escuchando tangos de Gardel y a la muchachada hincha del Toulousse de futbol que había ganado esa tarde en la primera jornada de liga....




El sol cayó y paseamos al coche ya que se hacía tarde, habíamos quedado en cenar en el hotel unas viandas compradas durante el día y había que madrugar al día siguiente para partir hacia un destino al que le tenía ganas por varios motivos: Carcassonne.

martes, 7 de septiembre de 2010

Diario de a bordo: Ruta Gastro - Enológica. Días 4 y 5 de Agosto. Burdeos y St Emilión.

El día 4 por la mañana desayunamos pronto, nos despedimos de la gente y nos encaminamos a Burdeos, donde nos alojamos en un hotel donde estaríamos los 2 días siguientes.

Llegamos al hotel a media mañana y decidimos descansar un poco de la larga noche anterior y la fiesta flamenca, así que comimos en el hotel unas viandas que habíamos comprado previamente en el Auchan de Facture antes de salir para Burdeos.
Nos apetecía probar más variedades de los miles de quesos distintos que vimos esos días y escogimos una pieza ahumada que estaba realmente espectacular (tanto que nos tragimos una pieza camino de Granada días después) junto con un paté de conejo cortado grueso y tomado a taquitos que acompañamos con un lomo y jamón ibéricos (éstos traídos desde España), una ensalada de pollo con salsa Cesar y atún en aceite.




Al comer temprano aprobechamos toda la tarde para hacer turismo por todos los sitios que nos quedaban por ver de la capital. De los muchos sitios que vimos estaban la Explanade de Quinconces, el mercado Des Grands Hommes, La Catedral de St André, el Hotel de Ville y un sin fin de plazas en todo el casco que guardaban cada una de ellas ese algo especial que las hacía distintas unas de otras.

Una pena la Catedral, que a pesar de no ser nada fea por fuera y tener unas bonitas vidrieras está muy mal cuidada, viéndose casi negra y las vidirieras ni se reconocen.
Por dentro sigue la misma tónica, mal llevada y cuidada a pesar de tener elementos interesantes.



Después de visitar la Place de la Republique, un cruce de estilos y elementos realmente extraños y donde se juntan por ejemplo un Hospital, El Palacio de Justicia de Burdeos y un Museo.....viendo que empezaba a oscurecer decidimos acercarnos dando un paseo a lazona de la Place St Pierre que tantas buenas sensaciones nos dió el primer día para cenar.

Después de 4 días en Francia nos apetecía tomarnos nuestros primeros crepes, asi que elegimos la Creperie Reno en el número 34 de la Rue du Parlament. El local esta muy bien decorado, tipico francés con poco espacio entre mesas, musica de fondo y una combinación entre sillas de madera y sofás.
En principio fueron 2 crepes, uno con: lardons,creme fraiche y cebolla junto con otro de carne de ternera, tomate, salsa carbonara y cebolla. Para pasarlo nos decantamos de nuevo por un pichet de tinto de la tierra y agua. Un detalle curioso de la naturalidad en la forma de ver el vino allí es que en la creperie nos lo sirvieron en cuencos de loza.
Tras degustar los salados, nos pedimos uno dulce para compartir en ésta ocasión de Platano, Chocolate y Ron flambeado. y como no 2 cafés para acabar la velada....una gran cena realmente rica cuyo importe no llegó a los 33 euros.



Después de la cena dimos un paseo por las calles cercanas a la Place de la Bourse y por el curso del Garona para después poner camino al hotel ya que al día siguiente madrugabamos camino de uno de los destinas que mas deseaba ver: St Emilión.

Y al día siguiente día 5, después de desayunar, salimos para St Emilión, pequeña ciudad muy cercana a Burdeos (unos 29 km), comuna del departamento de la Gironde en la región de Aquitania.
Solamente llegar hasta él es toda una experiencia visual ya que vas entre viñedos kilometros y kilometros hasta el pueblo, situado en un pequeño monte por lo que las calles están en cuesta en una gran mayoría de las ocasiones.
Dispone de una iglesia monolítica excavada en la piedra, a la que hicimos una visita guiada en castellano, realmente impactante.
Como datos interesantes en turismo hay personas que atienden en castellano con lo que no es difícil enterarse de lo que hay que ver y como hacerlo. La ciudad está llena, pero completamente llena de tiendas de vinos ya que la zona es muy famosa por la fabricación del mismo. Entre otras bodegas importantes están Chateau Cheval Blanc (si alguno a visto Entre Copas lo recordará perfectamente), Chateau Ausone, Chateau Angelus, Chateau Belair y Chateau Beausejour entre muchos otros. Las uvas más usadas son el Merlot y el Cabernet Franc ya que lo más elaborado es vino tinto.

Después de la visita turística cerramos visita a 2 bodegas y buscamos sitio para comer. Y aquí tuvimos una anécdota curiosa. En Francia, por lo menos por lo que pudimos ver, solo cuentan con un servicio en los restaurantes, con lo que si ves a un sitio y están las mesas ocupadas no te dan hora ni reservan mesas....simplemente te dicen que está completo y no es posible. Nadie te mete prisa para comer ni para pedir la cuenta, puedes tirarte lo que quieras en la mesa que nadie te apremia.....es la explicación que le encuentro de poner las mesas tan juntas, porque si se encuentran con 2 servicios bien, pero en principio cuentan con uno así que hay que aprovechar el espacio.

El caso es que vimos un sitio con muy buena pinta y una terraza con vistas a St Emilión que nos encantó, se llama Les Giron´dines....preguntamos y nos dijeron que estaba completo. Para matar la pena pasamos a una de las múltiples tiendas de vino que hay.....un sitio puesto con mucha clase y buen gusto: Vignobles and Chateaux , donde nos hicieron una cata según nuestros gustos en vinos y compramos uno de los vinos a probar, que me pareció realmente bueno: Chateau Pressac.
Al salir de la tienda, enfrente del restaurante de antes, decidimos pasar a preguntar para por lo menos tomar algo en barra y resulta que en 15 minutos escasos ya había mesa libre y nos sentamos a comer.

La comida consistió en un confit de pato con patatas y verduras al vapor para Olivia y filetes de cordero a la reducción de miel de acacia con flores para mí. Pichet de vino de la tierra, agua y un café gourmand para compartir.
Dos cafés solos pusieron fin a la comida que en éste caso salió algo más caro que de costumbre pero mereció la pena. Unos 45 euros.

Después de los cafés marchamos a la primera bodega, recomendación de Ramón Saavedra, Chateau Le Puy....situada en el pueblo de Saint Cibard, muy cerca de St Emilión. Nos recibió Jean Pierre, un anfitrión encantador que nos enseñó toda la bodega y explicó perfectamente su forma de ver el vino y los por qués de hacer los vinos que hace. Ésta bodega entra dentro de los vinos de agricultura biológica.
Probamos 3 añadas de la barrica mientras nos enseñaba una bodega como las de antes, de las que en España no se ven, barricas muy antiguas, algunas de más de 180 años y un ambiente especial, antes de enseñarnos la zona de los magnum millesimes y las barricas donde se elabora el vino que sale con 0% sulfitos....Le Barthelemy. Unas barricas con más de 50 años porque según explicó cuando uno pide sidra es para probar el sabor de la manzana al igual que cuando pide vino es para saborear la uva....y un vino con demasiadas notas de madera no es vino, según su opinión.

Después nos enseñó su Barthelemy de 0% sulfitos....nos enseñó y nos lo dió a probar. Una maravilla con una fruta bestial y un alcohol potente pero bien encajado. Abrió una botella, que valía cerca de 50 euros que nos tomamos entera entre los 3, hablando de muchas cosas.... a la hora de despedirse tuvo el enorme detalle de regalarnos el pedido que le hicimos para traernos.
Una de las bodegas que mas me impresionaron, sino la que más. Y un contacto más para pedir....ese Barthelemy será mío más pronto que tarde....




Volvimos a St Emilión a la segunda cita del día....Chateau St Sprit....una bodega muy pequeña que no fué nada del otro mundo, donde testeamos 5 añadas distintas pero ninguna emocionó realmente.....si caso la del 2005. Vinos muy alcoholicos, en demasía y algo descompensados.....

Volvimos a media tarde a St Emilión a seguir el turismo....

Pasamos por la Torre del Castillo del Rey, del S XIII, donde en la actualidad se realiza la Jurade o el Juicio del Vino Nuevo. Pasamos por las murallas, por sus plazas, sus calles medievales de adoquines.....todas en piedra.....
Todo un viaje por el tiempo, una ciudad impactante y maravillosa con la única pega de la masificación de la que es víctima a costa del turismo en masa.....

De todas formas merece la pena sin duda ninguna acercarse hasta allí y ver como se vive el vino y del vino, sus calles medievales plagadas de vinotecas donde todo el que atiende te explica todo sobre lo que te enseña y sabe que está vendiendo.....pero si hay algo por lo que esta maravilla merece ser visitada es por sus paisajes, declarados junto con la ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO lo que hace que las viñas estén muy cuidadas y regulado su tratamiento.

Para los amantes de la fotografía es un sitio ideal por su luz especial, que se refleja en las hojas de las viñas que todo lo pueblan creando un verde realmente espectacular.
A la caída de la tarde volvimos al hotel de Burdeos ya que al día siguiente partíamos a Agen primero y Toulousse después pero antes prometimos regresar y si es posible enseñar ese fantástico lugar a quien quiera compartirlo con nosotros la próxima vez.

Cenamos en el hotel unos quesos comprados esa tarde y otra especialidad de paté de la zona con una botella de vino comprada en una de esas múltiples vinotecas después de una buena ducha. Nos fuimos a la cama no sin antes repasar las fotos que habíamos sacado ese día, sintiendo algo de pena por abandonar "tan pronto" Burdeos y la zona de la Gironde, un lugar que nos fascinó.




Os dejo una muestra de esos paisajes espectaculares por si podeis coger una idea de lo que intento transmitir y os emplazo a la siguiente etapa que nos llevaría hasta Toulousse.

Crónica Apócrifa del XI Encuentro - Flor de Gewuztraminer

Expresiones como “la edad de oro” nos hacen pensar que un mundo dorado sería floreciente y apacible; lo primero tal vez, lo segundo ciertamente no. El olor a musgo nos recuerda que bajo esa densa capa de lujo hay una tierra apenas domesticada; el canto de los mejillones nos previene de acercarnos al jardín de la manzana carnívora, mientras artrópodos segmentados albinos pululan bajo el cuerpo desollado de un pequeño mamífero de pálida carne. Tan solo el caballo blanco pasea impasible entre serpientes y mangostas, y en su trono, el puercoespín dorado samurai extrae estoicamente de su pierna un tornillo de verde metal.


Cuentos


Una ordenada banda de cuchillos violinistas toca al ocaso, con reflejos ocres y azulados en sus hojas; sin embargo, la tensión creada por su música es la que infunde el terror en el adorable y suave oso de peluche que se ve forzado a huir arrastrándose por un metálico conducto de ventilación, en el que se cuela desde abajo la luz verde de una presencia alienígena.





Foso del castillo, exterior, día. Guerreros de negra armadura, con el agua por las rodillas, se zurran en un combate enérgico pero sin odio. El fuego de la guerra los ha tiznado, empiezan a acusar la fatiga del combate, pero se siguen batiendo heroicamente, como si tuvieran ocho brazos y pudieran permitirse perder alguno, aunque en el fondo saben que la victoria que alcanzarán será amarga, y por eso se obstinan en seguir luchando. Al final, el campo de batalla permanece en silencio, y una leve neblina intenta ocultar el horror de los cuerpos mutilados, las negras corazas cubiertas de sangre y el rostro compungido de los vencedores.





Rayos de un sol que se cuela por entre las grietas de una vieja puerta de madera, que se abre dándonos paso (tras el deslumbramiento inicial) a un mundo interior de paz y deleite, un florido jardín blanco, donde los peces vuelan de una fuente a otra, y sobre la hierba una jauría de micro-perros de albo y desaliñado pelaje apenas suenan como un cosquilleo en nuestras trompas de Eustaquio.






La oscuridad exterior hace destacar la silueta del Caballero sobre la refulgente y lechosa luz que brota del interior del templo del Grial. Pero ahora el santuario está en poder de Klingsor, de modo que ya no sirve a la pureza. Lascivas jóvenes vestidas de flores nos incitan con su danza a los placeres de la carne, en torno al cuerpo de un salvador que no es ya Cristo (el famoso), sino un humilde y anónimo redentor, que entrega su existencia metabólica para nuestra salvación y deleite.




Dejamos todo aquello atrás, huyendo en un oscuro barco de madera de la blanca sombra del frio polar; navegando desde las brumosas costas del norte en pos del sol que enrojece los frutos a finales del verano.